Cómo prolongar la vida útil de una herramienta de corte

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Maximizar la vida útil de las herramientas de corte no solo reduce costes operativos, sino que también mejora la eficiencia y productividad en los procesos de mecanizado. 

Una herramienta de corte que se desgasta prematuramente puede afectar la calidad de las piezas producidas, incrementar el tiempo de inactividad y, en última instancia, elevar los costes de producción. Además, apostar por prácticas que prolonguen la durabilidad de las herramientas contribuye a mantener una economía circular. En este contexto, la recuperación de herramientas se presenta como una solución eficiente y sostenible.

Para prolongar la vida útil de una herramienta de corte, hay que comprender los factores que influyen en su desgaste y deterioro:

Material de la herramienta: La durabilidad varía según el tipo de material utilizado en su fabricación, como carburo, acero rápido (HSS) o cerámicas. Cada uno ofrece distintas ventajas en cuanto a resistencia al desgaste y capacidad de corte.

Material a mecanizar: La dureza y abrasividad del material que se trabaja (acero, aluminio, titanio, etc.) afectan directamente al desgaste de la herramienta.

Parámetros de corte: La velocidad de corte, el avance y la profundidad de corte influyen en la generación de calor y, por ende, en el desgaste.

Refrigeración y lubricación: Un sistema de refrigeración adecuado minimiza el calor generado, reduciendo el desgaste y mejorando la precisión del mecanizado.


Reparar una herramienta de corte dañada es una alternativa rentable y sostenible frente a la compra de una nueva. Al restaurar el filo y la geometría original, se recupera su capacidad de corte y precisión, lo que prolonga su vida útil sin comprometer la calidad del mecanizado. En Manitek, contamos con la tecnología y experiencia en la reparación de herramientas, ayudando a nuestros clientes a reducir costes operativos y minimizar el desperdicio de materiales.

  • Parámetros de corte: Trabajar a velocidades inadecuadas genera sobrecalentamiento y desgaste prematuro.
  • Falta de mantenimiento regular: La acumulación de residuos o la pérdida de filo afectan la eficiencia de corte y aceleran el desgaste.
  • Almacenamiento inadecuado: La exposición a ambientes húmedos o el almacenamiento sin protección puede provocar corrosión y daños en el filo de la herramienta.

Al implementar estas buenas prácticas, no solo se prolonga la vida útil de las herramientas de corte, sino que también se mejora la productividad y se reducen los costes operativos. La selección adecuada, el mantenimiento preventivo y el uso de innovaciones tecnológicas son clave para lograrlo.

En Manitek, nos especializamos en la recuperación y reafilado de herramientas de corte, ayudando a nuestros clientes a maximizar su durabilidad y rendimiento.

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